SIEMPRE ES PRIMAVERA EN FORMOSA

Un perezoso invierno no queria marcharse todavia de la ciudad de Formosa, mientras que el otoño caprichoso, iba y venia con su tibia brisa sin despedirse del todo,y que decirle al presuroso verano que pretendia anticiparse a la primavera que aùn no llegaba oficialmente, en cambio el verano no queria esperar mas, estaba desquiciado en su estacion!!
Si,si, si aunque cuesta creerlo, cada estacion del año nos sorprende con la magia de su naturaleza, no hay un solo rincon que no este florecido en la provincia de Formosa, es la magia de la primavera que esta siempre presente en todas las otras estaciones aunque , el otoño, el invierno y el verano protesten!!
La vida en el campo y la ciudad se impregna con el perfume de las flores, el aroma de los frutos, ese olor a monte, a laguna y rio, a tierra seca y humeda, el rocio cubriendo la mañana, el trinar de tantas aves alegrando las mañanas, el polvo que nos empolva cuando llega alborotado el viento norte, ese sol que ilumina en el rio Paraguay para reflejarse entre los camalotes en flor quebordea la costanera de la ciudad.
Siempre es primavera en Formosa, porque todo el año sus arboles florecen haciendola mas hermosa,el lapacho rosado y amarillo como el palo borracho, el jacaranda, el ceivo, la falsa caoba blanca y violeta, el chivato, el paraido, el ecaulipto,
 la palma, el mango, el hinga, el aromito, el yacarepito, el ambahe, la tala. 
Hay florecillas silvestres cubriendo de colores los costados del camino, calles y ciclo- via.
Los niños juegan con una saludable alegria, la juventud hace deporte y cantan un himno al amor,las personas adultas comparten una caminata, un paseo en familia, unos deliciosos mates con factura o chipa bien calentita.
 Las gentes paseando por la avenida 25 de Mayo, la avenida Rivereña, la Costanera, en la plaza San Martin, en La Cruz y la avenida Independencia.
Siempre es primavera en Formosa, sus mañanas ruidosas de autos y colectivos, motos y bicicletas y los infaltables carreros en los barrios cercanos y alejados de la ciudad , sus siestas tranquilas y silenciosas, esa costumbre de hacer la siesta, aunque mas no sea media hora para descansar y volver a a retomar su actividad laboral, sus atardeceres calidas y alegres con paisajes maravillosos que nos asombran y sus noches que se vuelven màgicas para soñar con perfumes de flores que acarician el alma!